En un acto celebrado en la Cárcel La 40, 18 personas privadas de la libertad recibieron su diploma de bachiller, culminando con éxito su formación académica en la Institución Educativa María Dolorosa. Este logro representa un paso significativo en su proceso de resocialización y abre nuevas oportunidades para su futuro.
Brindando educación para la reintegración social
La ceremonia de graduación contó con la presencia de autoridades municipales, familiares de los graduandos, docentes y personal del centro carcelario. El Secretario de Educación Municipal, Carlos Jairo Bedoya Naranjo, exaltó la importancia de la educación como herramienta para la transformación personal y social. «Cuando se quiere, se puede», afirmó Bedoya Naranjo, dirigiéndose a los graduandos. «Esta graduación es un salto, un gran paso para transformar sus vidas y las de sus familias. La educación es la semilla para cumplir sus metas y el único límite debe ser el cielo».
Educación y la resocialización
Actualmente, la Cárcel La 40 alberga a 10 grupos de estudiantes privados de la libertad que cursan educación básica, media y superior. Este programa educativo se desarrolla en articulación con la Secretaría de Educación Municipal y la Institución Educativa María Dolorosa, con el objetivo de brindar oportunidades de aprendizaje y crecimiento personal a las personas privadas de la libertad.
«Es muy importante dentro del proceso de resocialización y fin último del tratamiento penitenciario, entregar a la sociedad 18 graduandos, quienes avanzan en su formación y hoy culminaron su bachiller y así lograr mejorar su parte personal y profesional», aseguró Alexander Zapata Largo, director de La Cárcel La 40.
Palabras de agradecimiento
Los graduandos expresaron su profunda gratitud a los docentes, coordinadores, al director de La Cárcel La 40 y a todo el equipo de apoyo que ha hecho posible su logro académico. Sus palabras reflejaban la esperanza de un futuro mejor, lleno de nuevas posibilidades y oportunidades.
La rectora de la Institución Educativa María Dolorosa, Bertha Jaraba, reafirmó el compromiso de la institución con la educación de las Npersonas privadas de la libertad. «Seguiremos brindando el acompañamiento necesario para que, en las siguientes promociones, los privados de la libertad cuenten con las garantías para alcanzar sus logros educativos», señaló Jaraba.
Esperanza y transformación
La graduación de estos 18 privados de la libertad es un mensaje de esperanza y transformación. Demuestra que, a través de la educación, las personas pueden superar las adversidades y construir un futuro mejor. Es un ejemplo inspirador que nos invita a reflexionar sobre la importancia de brindar oportunidades de crecimiento y desarrollo personal a todas las personas, sin importar su condición o pasado.
Fotos: Prensa Alcaldía de Pereira