Luis Guillermo López Valencia, originario de Buenaventura, es mucho más que un para atleta. Es un símbolo de resiliencia y esperanza. A sus 17 años, y tras perder ambos brazos en un accidente, ha encontrado en el deporte una nueva razón para soñar y triunfar.
Especializado en salto largo y los 100 metros categoría T46, compitió en estos I Juegos Nacionales Juveniles Eje Cafetero 2024. Por tercer año consecutivo representa a Valle del Cauca, razón suficiente para afirmar con profundo orgullo: “El deporte me devolvió el sentido de la vida”.
Aunque comenzó su carrera deportiva hace apenas cuatro años, Luis ya cuenta con una trayectoria admirable. Su entrenamiento diario de dos horas y media no se detiene, incluso ante las dificultades que enfrenta en Buenaventura, donde las condiciones de las pistas son desafiantes. “Aunque no sean las mejores, entrenar es posible”, asegura con determinación.
El apoyo de su familia, compañeros y entrenadores ha sido clave en su camino. Sus padres, aunque no siempre pueden acompañarlo en las competencias, le brindan un respaldo incondicional, mientras que sus compañeros se han convertido en su segunda familia. En cada salto y cada zancada, Luis lleva consigo la fortaleza de quienes lo apoyan.
Con un futuro prometedor por delante, sueña con convertirse en campeón paralímpico y competir en un mundial, al tiempo que planea estudiar administración financiera.
Luis Guillermo López es la prueba de que, con voluntad y optimismo, los límites no existen. Su historia inspira a todo un país y en la moderna pista de la unidad deportiva Centenario, con su espíritu de lucha demostró que el deporte no solo transforma vidas, sino que las llenas de propósito y grandeza.