En medio de la Semana de Pascua, el abogado y ex aspirante a la gobernación, Daniel Silva Orrego, finalmente vislumbra un merecido respiro.
Sin embargo, su atención se mantiene en alerta, ya que su nombre figura entre los posibles candidatos para ocupar importantes cargos en el Departamento Nacional de Planeación (DNP).
Con su trayectoria y experiencia, Silva Orrego podría ser designado como Secretario General, director Jurídico o encargado del departamento de Regalías en el DNP, consolidándose como un activo nombrable en el alto gobierno. No obstante, la incertidumbre persiste debido a ocupaciones fuera de Bogotá por parte del Jefe de Estado, Gustavo Petro, y del director nacional, el abogado Alexander López, manteniendo así en el congelador la designación de Silva.
Se aguarda con expectación que la locomotora de los nombramientos finalmente comience a moverse en diversas dependencias estatales. Mientras tanto, Silva se encuentra inmerso en retiros espirituales en su ciudad natal, Pereira. Aunque este período podría considerarse de reflexión, para él es un momento de análisis profundo, consciente del destino que podría deparar al partido político POLO.
En este contexto de transición y expectativas, se vislumbra un panorama de cambios y decisiones que podrían influir en el devenir político del país.