Gobernador le dio a la cultura de Risaralda el estatus que buscaba desde hacía mucho tiempo

  • La creación de la Secretaría de Cultura marca un giro histórico para el desarrollo artístico y humano del departamento.

Pereira, Risaralda, 6 de diciembre de 2025

En el silencio amable del jardín de su casa, rodeado de árboles que dejan filtrar la luz con calma, el gobernador Juan Diego Patiño Ochoa sostiene una taza de café preparado con grano risaraldense.

Allí, sin discursos acartonados y con la naturalidad de quien habla desde la convicción, explica cómo Risaralda dio un paso que el sector cultural esperaba desde hace décadas: la consolidación de la Secretaría de Cultura, aprobada por unanimidad con 12 votos positivos en la Honorable Asamblea Departamental.

En su relato, agradece el liderazgo del diputado Durgues Espinoza, coautor de la ordenanza y defensor constante de este propósito colectivo.

El gobernador señala que esta nueva secretaría no es un simple ajuste administrativo, sino una herramienta real para fortalecer la gestión del sector. Tendrá voz y voto en el Consejo de Gobierno, ejecutará directamente sus recursos y podrá formular y presentar proyectos con mayor solidez ante instancias nacionales e internacionales. Habla de la cultura como un espacio que abre caminos, forma talentos y genera oportunidades de vida para niños, jóvenes y adultos.

ESCENARIOS QUE SE TRANSFORMAN

En medio de esa conversación, Patiño recorre el mapa cultural del departamento. Describe con orgullo el renacer del Teatro de Belén de Umbría, hoy lleno de vida comunitaria. Menciona el avance de las obras del Teatro de Quinchía y del Teatro de La Virginia, y las intervenciones en las Casas de la Cultura de Marsella y La Celia, espacios que están recuperando su función como centros de formación, encuentro y creación artística.

Cada escenario es, para él, una prueba de que la cultura deja huella cuando se convierte en prioridad.

También reflexiona sobre el contexto nacional, donde el deporte y la cultura suelen enfrentar recortes presupuestales. Frente a esa realidad, Risaralda decidió proteger estos sectores, entendiendo que su impacto social es profundo y duradero.

HECHO EN RISARALDA: IDENTIDAD QUE VIAJA

El gobernador habla con entusiasmo de la proyección internacional del talento local. La marca Hecho en Risaralda, inicialmente centrada en productos y servicios del departamento, ahora también representa a artistas, escritores y gestores que llevan la identidad risaraldense más allá de nuestras fronteras.

La primera misión cultural en la Feria Internacional del Libro es una muestra clara de ese crecimiento: Risaralda crea, produce, escribe y se expresa con fuerza propia.

En la tranquilidad del jardín, lejos de los salones oficiales, Patiño resume su visión con sinceridad: los hechos hablan más que las palabras. Y la creación de la Secretaría de Cultura es uno de esos hechos que marcan un antes y un después para el sector.

Risaralda, ahora, tiene una cultura con casa propia. Una cultura con rumbo. Una cultura con futuro.

Fotos: Prensa Gobernación de Risaralda



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