El programa Jóvenes en Paz, liderado por el Ministerio de Igualdad y Equidad, ha iniciado su etapa de pre-inscripción en Pereira con el objetivo de beneficiar a 1.500 jóvenes en situación de vulnerabilidad tanto en la ciudad como en el departamento de Risaralda.
Este proceso comenzó tras dos días de socialización los pasados 9 y 10 de septiembre, que incluyeron encuentros en los corregimientos de Puerto Caldas y Caimalito, además de la capital risaraldense.
Este programa iniciativa busca ofrecer oportunidades de desarrollo personal y profesional a jóvenes entre 14 y 28 años, que se encuentran en situación de pobreza o vulnerabilidad monetaria.
El programa ofrece una ruta de atención integral, destinada a prevenir que los jóvenes sean captados por prácticas delictivas como la explotación sexual, el microtráfico o el reclutamiento forzado.
¿Por qué Pereira?
Pereira ha sido seleccionada como una de las ciudades prioritarias para implementar Jóvenes en Paz, debido a las condiciones de vulnerabilidad de su población juvenil.
Un estudio reciente de la Universidad Católica de Pereira reveló que más del 75 % de los jóvenes en la ciudad viven en hogares pobres o vulnerables.
Este fenómeno se vio agravado durante las protestas del estallido social entre 2019 y 2021, en las que Pereira fue uno de los epicentros de mayor conflictividad.
Además, Risaralda se posicionó en 2023 como uno de los departamentos con las tasas más altas de explotación sexual comercial que afecta a adolescentes, según datos de la Fiscalía General de la Nación.
Esta situación ha llevado al Ministerio de Igualdad a priorizar Pereira como uno de los 83 municipios que participarán en la segunda fase de Jóvenes en Paz.
Estas son las metas del programa
El programa Jóvenes en Paz tiene como objetivo integrar a 49.920 jóvenes durante el año 2024, y espera alcanzar más de 100.000 beneficiarios al finalizar el cuatrienio del Gobierno del Cambio.
La iniciativa tiene como fin fortalecer las capacidades de la juventud colombiana a través de la educación, el emprendimiento y la empleabilidad.
El fin último es contribuir al progreso del país, brindando herramientas para que los jóvenes puedan construir un futuro digno y alejarse de los riesgos asociados con la exclusión social y la falta de oportunidades.
Este proceso de pre-inscripción en Pereira marca un paso decisivo en la expansión territorial del programa, y se espera que la convocatoria permita identificar a los jóvenes que más se beneficiarán de esta intervención estatal, que busca transformar sus realidades y ofrecerles un camino alternativo hacia el éxito.