
El año pasado 355 personas fueron diagnosticadas en el Hospital Universitario San Jorge de Pereira con accidentes cerebrovasculares, patología considerada como la segunda causa de muerte en Colombia.
Pereira, 16 de marzo de 2025.
En Colombia los accidentes cerebrovasculares (ACV) son la principal causa de discapacidad y la segunda causa de mortalidad, con una tasa de 32,45 fallecimientos por cada 100.000 habitantes, lo que representa alrededor de 17.000 muertes al año, la mayoría de ellas mujeres.
En cumplimiento de las políticas del Gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño Ochoa, de ofrecer un servicio de salud con calidad y oportunidad, en el Hospital Universitario San Jorge se implementó una estrategia denominada Código ACV para garantizar la buena salud de los usuarios mediante la detección oportuna de los accidentes cerebrovasculares.
En el planeta, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año alrededor de 15 millones de personas sufren un ACV, de las cuales 6,5 millones fallecen y 5 millones quedan con discapacidades permanentes. Explicado en otros términos, cada 3 segundos una persona en el mundo sufre de un ataque cerebrovascular y cada 30 minutos muere una persona o queda con discapacidad permanente por no haberse detectado a tiempo los síntomas o por haberse tratado en un hospital que no estaba preparado.
LAS CIFRAS EN PEREIRA
En el caso de Pereira, en el Hospital Universitario San Jorge el año pasado 355 pacientes fueron detectados con diagnóstico de ACV, también conocidos como trombosis o derrames cerebrales.
Según las autoridades de salud, los síntomas más comunes de un ACV incluyen la pérdida de fuerza o adormecimiento en un lado del cuerpo, dificultad para hablar, visión disminuida en uno o ambos ojos, y pérdida del equilibrio o coordinación
El accidente cerebrovascular ocurre cuando el suministro de sangre al cerebro se interrumpe o se reduce, lo que priva a las células cerebrales de oxígeno y nutrientes. Esta condición médica puede causar daños graves y permanentes en la movilidad, el habla y las funciones cognitivas si no se recibe atención médica inmediata. Pero aproximadamente el 80 % de los ACV pueden prevenirse si se controlan los factores de riesgo, entre ellos la hipertensión, la diabetes, el tabaquismo, el sobrepeso, la inactividad física y el sedentarismo.

El gerente del hospital, Javier Alejandro Gaviria Murillo, indicó que “la institución cuenta con los equipos humanos y biomédicos necesarios para un diagnóstico acertado, que puede ser la diferencia entre una vida saludable y una discapacidad permanente o la muerte”.
“EN EL HOSPITAL ESTAMOS LISTOS”
El neurólogo Carlos Andrés Montilla Trejos, líder de la estrategia Código ACV en el Hospital San Jorge, asegura que esta condición se prevé que afectará a una de cada cuatro personas a lo largo de su vida, por lo que ante cualquiera de los síntomas es importante consultar de inmediato, porque esta es una urgencia en la que cada minuto cuenta. “En el Hospital San Jorge estamos listos para resolver esta urgencia médica, tenemos protocolos organizados y personal capacitado para atender estas urgencias”, anotó.
Según la Organización Mundial de la Salud el tiempo es esencial en el tratamiento del accidente cerebrovascular porque cada minuto sin tratamiento significa que más células cerebrales se ven privadas de oxígeno y nutrientes, lo que provoca un daño irreversible.
Al respecto, el gerente del Hospital San Jorge, indicó que “las estadísticas mundiales sobre los accidentes cerebrovasculares son alarmantes, así que la adopción del Código AVC en nuestro hospital es un avance muy importante”.
Fotos: Prensa Gobernación de Risaralda