Las mujeres están «sosteniendo al sistema bajo un modelo de explotación«, aseveró este jueves la coordinadora de Políticas y Presupuestos para la Igualdad y el Desarrollo Sustentable en la organización civil Equidad de Género, Ciudadanía, Trabajo y Familia, Alma Colin.
La economía del cuidado en México aporta un 24 % al producto interior bruto (PIB), más de lo que aporta el sector de la manufactura y el comercio, con un 22 % respectivamente, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En esta idea coincidieron los invitados al evento EFE Diálogos titulado ‘Visibilizar la economía del cuidado en Latinoamérica’, celebrado en Ciudad de México y organizado por la Agencia EFE en colaboración con Open Society Foundations.
A pesar del aporte económico que supone el trabajo no remunerado, que realizan las mujeres, en su gran mayoría, en Latinoamérica, estas labores siguen estando «invisibilizadas» y «mal reconocidas y pagadas», afirmaron las expertas invitadas al evento.
Falta normativa
«Las mujeres estamos subsidiando la economía del país y no estamos teniendo de regreso las mismas aportaciones, no nos están dando los servicios y los derechos que necesitamos», explicó Dulce Claudia Colín Colín, la directora general de Igualdad y Atención a la Violencia de Género en la Secretaría de las Mujeres de la Ciudad de México, la encargada de abrir el debate.
Así, aunque existen algunas leyes al respecto a nivel local y estatal, las panelistas declararon que los cuidados son una “responsabilidad pública” que debe asumir el Estado.
En este sentido, para la subdirectora de Coordinación en el Instituto Nacional de las Mujeres, Karen Makieze Medina Ortiz, “el Estado debe ser el principal responsable de proporcionar las condiciones humanas, materiales, económicas y políticas para que una mayor parte de la población pueda acceder a esos cuidados”.
Además, los panelistas coincidieron en que los trabajos de cuidado también deben verse como un derecho.
«Los cuidados son el centro y el sustento de la vida y gracias a ellos nos beneficiamos todos, por eso, son un derecho«, apuntó el coordinador del programa Género y Trabajo Del Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir, Carlos Andrés Pérez Narvaez.
Las trabajadoras del hogar necesitan tener “seguridad social, un salario justo y un contrato”, reivindicó con su testimonio la integrante del Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar (SINACTRAHO) Rebeca Fabila González.
Propuestas
El 80 % de las personas que cuidan en México son mujeres y ellas dedican 12 horas semanales más que los hombres a tareas del cuidado y del hogar.
Las mujeres dedican 37,9 horas y los hombres 25,6 horas semanales a dichas tareas, según datos del Inegi.
Para revertir esta situación es importante contar con el apoyo de los hombres y que ellos reconozcan “el privilegio” que tienen, según reconoció Pérez Narvaez, ya que, aunque los hombres también participan en estas tareas, es necesario ver “cómo y cuánto participan”.
Asimismo, la infancia y la educación es clave para avanzar en este sentido, pues es en las primeras edades cuando “hay que generar la ética del cuidado, que debe estar inserta en el sistema educativo y cultural”, apuntó Colin.
Otras propuestas debatidas en el evento pasan por establecer una renta básica universal para las trabajadoras del hogar, lo que constituiría “una aportación para valorizar y remunerar los cuidados y reconocer las actividades que se dan el hogar”, en opinión de Makieze Medina.
Fuente:EFE