- Este esfuerzo, apoyado por líderes locales y científicos, promete obtener datos clave sobre la ocupación y densidad de estas especies esenciales para los ecosistemas del país.
La primera temporada de monitoreo de puma y oso de anteojos en el Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI) Cuchilla del San Juan y el Parque Nacional Natural Tatamá comenzó oficialmente.
Este ambicioso proyecto, que se desarrollará durante tres meses, contempla la instalación de 200 cámaras trampa en zonas estratégicas para monitorear la ocupación y densidad de estas especies en el territorio.
Con la participación de aproximadamente 40 personas organizadas en 13 equipos de trabajo, se llevará a cabo uno de los mayores despliegues de cámaras trampa en Colombia hasta la fecha.
Mario Alejandro Santana Tobar, biólogo especialista en Áreas de Conservación de WCS Colombia, explicó que “el proyecto abarca 100 celdas de 1×1 km, en las que se instalarán dos cámaras en cada celda: una en el centro para estimar densidades poblacionales y otra para evaluar la ocupación de las especies en el área”.
Este monitoreo es el primer peldaño para la toma de decisiones a escala local en el manejo y estrategias de conservación del oso andino, la única especie de oso en América del Sur, y del puma, un predador clave para la regulación de los ecosistemas, pero que también interactúa negativamente con algunas comunidades locales.
Taller de capacitación: un paso clave en la preparación
Previo al monitoreo, se realizó un taller de formación para los participantes, que incluyó a líderes locales, organizaciones ambientales de la zona, y personal de WCS Colombia, Parque Nacional Natural Tatamá, CARDER y FECOMAR. El taller tuvo como objetivo fortalecer las capacidades técnicas de los equipos de campo, brindándoles herramientas para realizar un monitoreo riguroso y eficiente.
Innovación en metodologías de monitoreo
El proyecto se destaca por la implementación de una metodología inédita en Colombia para la estimación de densidades poblacionales. El uso de cámaras trampa combinado con el método de distancia proporcionará datos sólidos que estimarán la cantidad de individuos de osos y pumas presentes en la región, estableciendo una base importante para futuras acciones de conservación.
“Este es el tercer monitoreo de oso en la región, pero el primero en abarcar un área tan extensa para el puma”, explicó Leonor Valenzuela Ospina, coordinadora de análisis y síntesis de WCS Colombia. “La información que recolectemos no solo ayudará a entender los factores que afectan a estas especies, sino que también servirá como referencia para evaluar el impacto de nuestras acciones de conservación en el futuro”, agregó la experta.
Un futuro para la conservación en Colombia
El monitoreo se extiende a lo largo del DRMI Cuchilla del San Juan, el Parque Nacional Natural Tatamá y sus áreas de conectividad, que son fundamentales para mantener corredores biológicos que facilitan la movilidad de estas especies y de otros mamíferos medianos y pequeños.
Este esfuerzo, que integra ciencia y conocimiento local, representa un avance significativo en la conservación de especies clave en Colombia. Los resultados permitirán identificar áreas prioritarias para la protección y contribuirán a mitigar los conflictos entre las comunidades y los depredadores tope, promoviendo una coexistencia pacífica y sostenible.
Durante los próximos tres meses, las cámaras instaladas en el territorio recopilarán información que beneficiará no solo a pumas y osos andinos, sino también a otras especies de mamíferos que habitan en estas montañas.
Con este proyecto, Colombia reafirma su compromiso con la conservación de su biodiversidad y la protección de los ecosistemas que sustentan a sus especies más emblemáticas.
Fotos: Prensa CARDER